Ábrete.



La espalda para quien apuñale,

La boca por quien no hable,
La cabeza por quien no te piense,
Los brazos por quien no te abrace,
El alma por quien no entre
Allí donde nada se abre
Y todo sucede.
Escápate
A dónde lo que suceda,
Sea libre del puñal,
Sea boca donde besar,
Cabeza para pensar
En qué manos estar
Para entrar al alma
Que deja libertad.